Dialogando con tu gente
Toda conversación entre dos personas se establece con un propósito definido. La atención prestada durante la misma será productiva o improductiva en función de la intención y consciencia con la que se aborda dicha conversación. Fácilmente puedes observar como todas las interacciones verbales que mantienes en el ámbito de las relaciones sociales y personales pueden integrarse dentro de estas tres categorías:
1. Mantenimiento emocional o inconsciente:
(Hablar por hablar). Hay conversaciones banales e insustanciales que no nos llevan a ninguna parte y que se inician en su mayor parte para eliminar tensiones. Estas conversaciones tienen un alto riesgo de acabar en conflictos, roces o pequeñas discusiones ya que se inician al coincidir en un mismo espacio personas no afines o personas afines pero con conflictos de intereses. Basta con tener una prioridad diferente para que estos conflictos de intereses aparezcan.
2. Mantenimiento diario/físico/imagen:
En este apartado se dan la mayoría de conversaciones que podríamos llamar de corte «genérico». Se establecen para actualizar en el día a día y de manera informal con personas afines o conocidas. Aquí se incluyen todas las conversaciones relacionadas con el tiempo o las rutinas cotidianas: ¿Qué tiempo hace?, ¡qué buen día! ¡Qué frió o que calor!; ¿Has descongelado el pan? ¿Bajaste la basura? ¿Te gusta el programa tal en la tele?, Etc. Forman parte del protocolo social de buenas maneras. En este protocolo se observa la imagen típica de varias personas en un ascensor esperando su turno para entrar o salir, la de vecinos en un portal poniéndose al día, compañeros en la pausa del café, etc.
Mejor no hablar de terceras personas cuando no están presentes
- Es aquí donde suelen colarse las actualizaciones relativas a terceras personas lo que es síntoma de que las llevamos “a cuestas” y necesitamos aliviar nuestra carga compartiendo sobre ellas. Hablar de terceras personas es la principal causa de conflicto ya que es como si una tercera persona se colara en la conversación sin venir a cuento.
3. Mantenimiento de fondo/actualizaciones/cambios etapa:
Por último están las conversaciones formales relativas a los protocolos familiares y sociales en las que se comunican los asuntos importantes. Aquellos que suponen o pueden suponer cambios importantes para el espacio familiar, laboral o social que compartimos.
Ejercicio y equilibrio emocional

La forma en la que haces ejercicio habla de ti
Las conversaciones con tu cuerpo (la forma en la que haces ejercicio), reflejan fielmente las pautas de relación y comunicación verbal que mantienes con los demás. En la medida que tienes más problemas de comunicación, más necesitado estará tu cuerpo de atención en relación al tema mantenimiento físico.
Tener una rutina personalizada que te ayude a ponerte al día contigo mism@ garantiza que tu vida laboral y personal fluyan en armonía. Compartir en X
Dialogando con tu cuerpo
1. Mantenimiento emocional o inconsciente:
Aquí encontramos a las personas que «dialogan con su cuerpo» con la única intención de quemar las tensiones que van acumulando a lo largo del día. Aunque realmente es un monólogo ya que no suelen tener en cuenta las necesidades de su cuerpo. Lo único que quieren es eliminar su malestar sin saber de dónde proviene. Son personas que hacen ejercicio porque al finalizar la sesión se encuentran emocionalmente mejor aunque su cuerpo suele quedarse para el «arrastre».
2. Mantenimiento físico/imagen:
Aquí encontramos a las personas que realizan rutinas de mantenimiento físico con regularidad. Aquellas que tienen un objetivo concreto en mente: perder peso, rehabilitar una lesión, evitar dolores de espalda, mantenerse saludables, etc. En este apartado se sitúa una mayoría de personas que piensan que el ejercicio es bueno para la salud y lo incorporan como una «obligación» más de las que el programa cultural establecido nos propone. El problema es que el cuerpo no reconoce como suyo aquello que él mismo no pide.
Al cuerpo no le gustan las rutinas. A la mente sí.
- De nuevo la parte beneficiada en este diálogo es la mente. Prácticamente es un efecto placebo que se mantiene mientras te ejercitas y que desaparece cuando finalizas la práctica. En este apartado se encuentran verdaderos adictos al tema.
3. Mantenimiento holístico:
La tercera vía está poco explorada y consiste en hablar con el cuerpo de tú a tú mientras configuras tu mente para que aprenda a escuchar sus respuestas. Es un trabajo inmensamente enriquecedor para el que no hay recetas que sirvan a todo el mundo. Por eso mi recomendación, si tienes problemas de mantenimiento físico/corporal es que contactes con un terapeuta experto en reeducación corporal holística. Una vez pones tus sentidos al día, el diálogo con tu cuerpo se hace fluido y natural y basta con alguna que otra ‘conversación’ para mantener tus constantes vitales al día.
A la hora de comunicarte con tu cuerpo mejor aprender de la mano de un experto en reeducación corporal holística. Compartir en X
🎬 En la película ’50 primeras citas’ puedes ver de forma sencilla cómo el cuerpo guarda memoria de lo experimentado.

Título original: 50 First Dates
Año: 2004
Duración: 99 min.
País: Estados Unidos
Director: Peter Segal
La primera vez que vi esta película no pude dejar de llorar a ‘moco tendido’ con la escena final. He vuelto a verla en varias ocasiones y sigue emocionándome aunque ya no se me cae la lagrimilla. Puedes verla como una simple comedia romántica o quizás, como me pasa a mí cada vez que la veo, veas en ella la magia que esconde nuestro cuerpo. Magia que hace que nuestro cuerpo sepa antes que nosotros si amamos u odiamos.