¿Sensual como Scarlett o andrógina como Keira?
De madres felices, hijas actualizadas… ¿Alguna vez te has parado ha pensar qué factores son los que te hacen parecer más o menos femenina? ¿Has tenido dudas sobre tu orientación sexual en un momento dado? ¿Te gustaría conocer las bases para tener una relación armónica con tu madre? ¿Te gustaría conocer las bases para tener una relación armónica con tu hija? Esta entrada contiene todas las claves para resolver estas cuestiones relacionadas con tu conciencia de género.
Desarrollo personal y orientación sexual
La toma de conciencia diaria nos dota de interactividad entendiendo ésta, como la capacidad de realizar cambios en nuestra vida cada vez que es necesario. Esta interactividad sólo es posible, de forma natural, cuando la madre RECONOCE en el padre, su pareja, a su igual (función espejo). Sin esta condición somos como una hoja al viento a merced de las circunstancias ambientales y ni el éxito ni el fracaso que podamos tener estarán en nuestras manos.
Memoria viva. La importancia de actualizar (o mirar hacia adelante)
La familia es el tejido conectivo de la sociedad y configura la estructura energético-emocional que da soporte y articula el desarrollo de la convivencia social (política, económica, cultural, religiosa, etc.). Su función es regular «el paso del tiempo». La familia (el hogar) es el espacio donde ajustamos, día a día, nuestras constantes vitales y no lo hacemos por el simple hecho de dormir, comer o asearnos. La autorregulación personal es posible gracias a la interacción con los miembros de nuestra familia. Incluso estas funciones básicas para la salud emocional (dormir, comer y asearse), son la resultante de estas interacciones personales ya que los ritmos biológicos humanos (hormonales, nerviosos, etc.), son directamente condicionados por nuestro sistema afectivo o de relación.
Dentro de la estructura familiar es la figura femenina la que tiene la capacidad biológica de AGLUTINAR, de dar cohesión y homogeneizar los distintos afectos que componen el núcleo familiar. Y la forma de hacerlo, LA ÚNICA FORMA, es por medio del amor. Amor, por supuesto, objetivo y consciente, no emocional e instintivo, que liga de forma transitoria o superficial.
- El amor objetivo y consciente necesita de la toma de conciencia diaria. De la expresión y renovación de los sentimientos y, sobre todo, del equilibrio emocional. Imposible si la mujer no es consciente de la función vital que desarrolla dentro de su familia y dentro de la sociedad.
El afecto entre madre e hija ha de ser consciente y bidireccional

Cuando el amor de una mujer por su familia (compañero e hijos), no supera el lazo instintivo-emocional está sujeto a todo tipo de interferencias (emocionales, sentimentales y culturales), que surgen en función de las circunstancias ambientales.
La mujer (o figura polar femenina) tiene las claves para conectar el pasado con el presente y éste con el futuro. Y lo hace por medio de su afectividad. Compartir en X
Transmisión generacional
Como hija está ligada a su madre y a la madre de su madre y a la madre de su abuela. Esta transmisión emocional nos conecta directamente con las raíces de la humanidad y dota a la mujer adulta de una fuerza vital impresionante. Para asumir esta herencia emocional y garantizar la transmisión generacional, el afecto entre madre e hija ha de ser consciente y bidireccional. No basta con que la madre «quiera» a su hija sino que ésta ha de asumir su rol femenino positivando al 100% la relación con su madre.
Duelo por la madre
- El duelo por la pérdida de la madre, cuando la relación afectiva, aunque emocional, era positiva, suele cursar en mujeres adultas y madres de familia, en forma de crisis vital que puede manifestarse en forma de depresión, divorcio, enfermedad sicosomática, etc. Es como si de pronto, y sin haberlo previsto, entrara una suma importante de efectivo en la cuenta corriente y empezaras a gastar sin ton ni son.
- Cuando, por el contrario, la relación afectiva entre madre e hija era de índole negativa, la madre al morir, se lleva consigo la conexión con las raíces familiares y el duelo traerá consigo grandes dosis de dolor y desesperación aunque no se manifiesten en relación directa al duelo.
- Aunque, en apariencia, los dos duelos cursan en forma de crisis vital, del primero la hija sale renovada y más madura, con mayor capacidad. En el segundo caso, la crisis se hará crónica y la mujer no alcanzará su pleno desarrollo personal y morirá sin haberse realizado.
Figura polar masculina
Si el tejido conectivo de la sociedad es femenino, ¿qué función tiene el varón (figura polar masculina) en la familia? Compartir en X
La función del compañero o esposo dentro de la especie humana es vital en la estructura familiar. De hecho, la mujer no puede realizar su función reguladora de forma positiva si no encuentra a un compañero adecuado.
Si la mujer tiene la función de aglutinar en su interior, en su MENTE-CORAZÓN, los distintos afectos de su familia. (¡Qué imagen más bella! podría decirse que mirando el corazón de una mujer se puede saber la armonía que su familia va a manifestar.)
La función del compañero es dar cohesión a SU mujer. Y de nuevo, en esta función biológica-emocional regulada por la naturaleza en forma instintiva durante millones de años, se hace necesaria la toma de conciencia para que el compañero y esposo sepa reflejar la luz y la claridad. El orden que su compañera le pide. (El componente consciente de los votos del matrimonio lo refleja).
El compromiso de vivir en pareja
- La vida de «casado» necesita de una disciplina consciente para que la convivencia de la pareja no se resienta. Tanto la esposa como el esposo (aunque sean pareja de hecho) deben de ser conscientes de las actitudes y hábitos que fomentan el amor y de aquellos que lo dispersan o apagan. Se hace imprescindible una educación para el amor. A falta de una sólida transmisión afectivo-emocional ya que son muy pocas las parejas de padres y esposos que han transmitido a sus hijos las claves del amor PARA TODA LA VIDA.
De madre a hija
Cuando la mujer tiene una hija y mientras ésta conviva en el hogar familiar, la dirección del flujo energético-emocional va de la madre hacia su hija. La madre ha de ver a su hija como su futuro y la hija ha de ver a su madre como su presente. Es la hija la que se mira en el espejo de su madre y, mientras crece, el futuro se hace posible. Y es la toma de conciencia de este proceso la que favorece «el paso del tiempo» o transmisión generacional.
De esposa a esposo
Cuando la hija se empareja con su compañero, éste pasa a ser su PRESENTE (su espejo) y la madre se convierte en reflejo de su pasado. Cualquier problema con el compañero es un problema de base en la relación madre-hija y cuando la esposa no reconoce a su pareja como su igual-reflejo, la carga polar del hombre se invierte y esto dificulta las relaciones sexuales.
Proyecto de futuro en común
Para formar una pareja, hogar o familia estable se necesita un proyecto de futuro en común. Antiguamente era más sencillo conseguir este proyecto en común pues la esposa se integraba en el proyecto que tuviera el esposo en su rol de esposa y madre y pasaba a ser la «señora de». La mayor o menor felicidad de estas parejas dependía, por lo general, del proyecto de vida establecido en función de sus aspiraciones socio-personales. Aun así, para que el hogar fuera feliz era necesario que la esposa se «reconociera» en su esposo como si se viera en un espejo. Admirando las virtudes de su esposo como suyas y corrigiendo los defectos como propios, todo ello desde su interior.
Paso a paso
La pareja ha de ser seleccionada conscientemente, valorando su historia personal. Para ello es recomendable un tiempo de citas en el plano amistoso. Empezar despacio valorando que es lo que te gusta o atrae de esa persona e ir conociéndose poco a poco. Hoy día, compartir un proyecto de futuro en común se complica bastante a causa de la incorporación laboral de las mujeres. Conciliar las proyecciones laborales de los dos miembros de la pareja con los roles familiares de esposos y padres, hace que muchas parejas fracasen y que otras muchas compartan sus vidas de forma insatisfactoria. Una pauta positiva es retrasar el emparejamiento conscientemente hasta tener un proyecto de futuro laboral más o menos claro. Esto facilita las cosas a la hora de elegir una pareja compatible.
Soltar a mamá
Una vez emparejada, la relación hija-madre CAMBIA. La hija ahora es el PRESENTE y su madre el PASADO y cuando se vean ha de ser con nuevas reglas. Si la transmisión emocional-afectiva ha sido completada no habrá dependencia emocional y las visitas sólo serán necesarias (o apetecerán) cada cierto tiempo y siempre en «formato familiar» (con la pareja).
- Si los hijos son el futuro que viene al presente para hacerse realidad. Los padres _una vez que estamos casados o emparejados_ son el pasado que viene al presente para ACTUALIZARSE.
- Por todo esto, las relaciones familiares y dentro de ellas los EVENTOS, han de seguir un protocolo específico, en el tiempo y en los espacios, para que el tejido familiar mantenga su estructura. Esto sólo es posible si la mujer en su rol de esposa y madre toma conciencia de sus sentimientos y es coherente con ellos.
Influencia de la madre en la orientación sexual de los hijos
Polaridad femenino-Yin masculino-Yang

En este caso, la madre reflejará al hijo en su cualidad de «hombre-varón» y no en la de «hijo» por lo que se crea la figura de incesto emocional que en forma inconsciente provocará el rechazo del hijo hacia su padre. Rechazo que siente la madre y que el hijo tan sólo refleja. (La cualidad de los niños y niñas mientras crecen ha de ser de índole femenina-biológica),
Buscando a papá
Este hijo varón crecerá ligado a la madre y no completará su desarrollo personal en la pubertad como varón pues no encuentra DENTRO DE SU MADRE la frecuencia de su compañero-padre, que es de dónde se integra. Esto dará lugar a una homosexualidad declarada o latente, ya que en el tema de la orientación sexual, todo son grados. Nadie es totalmente masculino o femenino, ni siquiera los hombres o las mujeres. (Teoría de la personalidad Carl Gustav Jung arquetipos ánima-animus) Hay parejas de heteros que en el fondo no lo son y, al contrario, parejas de homos que lo son por circunstancias que no han podido controlar.
- Que la homosexualidad sea latente o declarada tiene que ver con la forma en la que los padres manifestaban su relación ante sus hijos.

De madres felices, hijas actualizadas
Es la madre la que COMPLETA, dentro del mapa emocional de sus hijos (hembra o varón), la figura afectivo-sentimental que dará paso a una futura pareja. Cuando es la hija la que no completa su mapa emocional de pareja, buscará hombres que tengan la estructura emocional de su madre para completar el proceso, lo que la ligará permanentemente AL PASADO.
Madres satisfechas
Las hijas de madres satisfechas, en lo femenino, encuentran parejas que las reflejan a ellas y no a sus madres. Viven en el presente. Compartir en X
Regreso al útero
La homosexualidad femenina no tiene nada que ver con la masculina y se produce cuando la mujer está dañada en su rol de hija y es una regresión al útero materno lo que se persigue. En la homosexualidad femenina no hay rechazo a lo masculino, es que ni siquiera se contempla. La madre no completó la transferencia emocional hacia su hija y ésta busca en otras mujeres el soporte emocional para sentirse COMPLETA EN LO FEMENINO.
En estos casos es posible que la terapia o el «paso del tiempo» (las experiencias vitales) cambien esta orientación sexual al completarse el proceso de maduración emocional. El hecho de que en las parejas de lesbianas sea habitual que, en una de ellas, su apariencia sea algo más andrógina o declaradamente masculina, tiene una explicación basada en la expresión de la polaridad sexual. Las mujeres que necesitan COMPLETAR SU PROGRAMA FEMENINO, buscan completar su proceso de crianza o maternaje mediante un tiempo de interiorización exclusiva en el ámbito de la energía femenina. De hecho, hay mujeres que tras un divorcio y con hijos, se sienten atraídas a explorar el sexo con otras mujeres porque se sienten vacías, rotas o desconectadas de su fuente femenina. Tras su fracaso no confían en su REFLEJO MASCULINO y se apartan del ESPEJO de los hombres.
Hay que saber que es la relación con el polo opuesto la que nos convierte en FÉMINAS. Compartir en X
¿Tu madre disfrutaba en la cama con tu padre?
Si la madre no TRASMITE a su hija una impresión positiva de la relación con su padre (su relación de amantes, no como esposos o padres), esta futura mujer tendrá un bloqueo ya desde pequeña pues su personalidad va a crecer carente de ese reflejo de lo masculino que, repito de nuevo, lo transmite vía emocional la madre en función de su experiencia diaria y, por tanto, la niña manifestará un aspecto más andrógino o masculino, según el grado de NO-REFLEJO. Las mujeres de aspecto poco femenino (lesbianas o no), suelen ser mujeres que desde niñas sintieron el rechazo de su madre hacia su rol de mujer-esposa.
Que el rechazo sea interno (homosexualidad declarada) o latente (tan sólo en actitudes) depende de cómo la madre manifestara su propio rechazo. Hay madres que sufren en silencio su insatisfacción sentimental y sexual, otras no paran de gritar o maltratar a sus hijos y otras padecen malos tratos, de nuevo todo son grados. En casos extremos, puede haber tanto enfrentamiento entre el sexo de nacimiento (biológico) y el emocional (el recibido) que la persona siente la necesidad de ir más allá de actitudes y cargas sexuales, necesita operarse y cambiar su sexo.
La búsqueda del polo sexual masculino
El concepto de desarrollo personal implica la búsqueda del propio equilibrio a partir de un POSICIONAMIENTO consciente. Compartir en X
En estas parejas hay un miembro que ATRAE que es el verdadero homosexual. El miembro de la pareja que es ATRAÍDO podría ser atraído también por una mujer, como de hecho ocurre en ocasiones. Sólo esta persona en particular (hombre o mujer), TIENE LA CARGA EMOCIONAL que él necesita.
En la homosexualidad se atraen DOS PERSONAS con cargas emocionales específicas. El sexo (pene o vagina) no cuenta en el ámbito emocional. En todos los enamoramientos hay una figura que atrae y otra que es atraída ya que todas las relaciones emocionales y enamoramientos funcionan así.
Estabilidad en parejas homosexuales
Parejas femeninas: Cuando dos mujeres se estabilizan en su rol de pareja acaban adoptando una relación de roles paterno-filiales debido al proceso de proyección emocional. Al sentirse completa como mujer gracias a su relación, la persona que atrae y que hasta ahora tenía el rol paterno interiorizado, empieza a exteriorizarlo y esto ayuda a dar estabilidad a su relación de pareja. (Ya que por la ley de los opuestos, la pareja que atrajo tenía carencia en su rol masculino-paterno).
Parejas masculinas: Cuando dos hombres se estabilizan como pareja acaban adoptando una relación de roles materno-filiales. La persona que atrae, al sentirse completo como hombre en el plano emocional-sexual y que hasta ahora tenía el rol materno interiorizado, empieza a exteriorizarlo y esto ayuda a la estabilidad de la pareja. La ley de los opuestos aquí funciona a la inversa, la pareja que fue atraída por el varón homosexual, tenía carencia en su rol femenino-materno. De hecho hay hombres «heteros» que se sienten atraídos por las características femeninas de gais, travestis, etc., porque en su relación de pareja los roles no están definidos.