Aunque todas las personas se mueven, observarás fácilmente que no lo hacen de la misma manera. A la hora de moverse cada persona tiene su propio estilo. Esto es debido a que los músculos no solo realizan un movimiento sino que, a la par, expresan la actitud, el sentimiento o emoción con que se realiza dicho movimiento.
Observa las señales que tu cuerpo te envía. Tensiones corporales
Cualquier problema o conflicto personal mantenido en el tiempo deja su huella en el plano físico. Músculos con exceso de tensión nos cuentan que la persona tiene un exceso de tensión en su vida. Los motivos por los que las personas acumulan un exceso de tensión son múltiples y pueden darse varios a la vez: miedos, impotencia, agresividad contenida, incapacidad para expresar sentimientos o ideas, etc. Desde un punto de vista holístico no es recomendable tratar una tensión corporal sin antes haber tratado las causas holísticas que la producen.
En cambio, cuando la persona ya está en proceso de resolución del conflicto, e independientemente de que haga o no, algún tipo de ejercicio físico, es altamente recomendable realizar unos ejercicios básicos que estén en relación directa con el patrón emocional que en ese momento esté superando.
Reeducación corporal Método Cronos
En una primera sesión se comprueba el nivel de tensión de tu cuerpo. A continuación te facilitamos unos ejercicios y estiramientos personalizados que comienzan a desinstalar el patrón emocional erróneo o caduco. Ten en cuenta que si hay un exceso de tensión en un musculo, seguro que hay alguna deficiencia en algún otro músculo que esté relacionado con el musculo tenso. En estos casos es muy posible que en algún momento tengamos que realizar algún ejercicio de estimulación en zonas débiles. Poco a poco, el sistema nervioso va re-equilibrando su estimulación. La energía comience a circular mejor y vas tomando conciencia de tus tensiones corporales. Lo que evita que se reinstale el conflicto desde el hábito físico-postural.
Las tensiones se acumulan por falta de recursos para afrontar la vida. Share on X
Por ejemplo:
- Tensión de cabeza por no expresar verbalmente lo que se piensa o siente, por lo general pensamientos retenidos.
- Tensión cuello. Puede haber diferentes causas según la zona de tensión. Pueden manifestar problemas de comunicación. Rigidez hacia la vida o problemas para mantener la cabeza firme. También puede ser reflejo de trastornos digestivos
- Tensión en mandíbula, agresividad contenida.
- Opresión pecho o nudo en la boca del estomago, acumulación de angustia y ansiedad.
- Dolor de hombros. Como me siento realmente en relación a lo que hago o la carga que soporto.
Estas son descripciones generalizadas de las tensiones más corrientes y aun así, hay diferentes matices dentro de cada contexto. Por supuesto, todo tipo de lesión física o accidente sigue el mismo patrón emocional. Si no tienes práctica en observar las señales que tu cuerpo te envía o en regular tus emociones, te recomiendo una consulta holística para auto chequear tu sistema.
Aviso: estas recomendaciones son preventivas/educativas y no sirven para dolores agudos o personas sometidas a tratamientos químicos.